El mejor modo de empezar la semana es comerse el lunes, así, directamente.
Empezarla en martes tiene otro encanto, otro ritmo.
No se puede tener puentes y puentes ( aunque sea trabajando en el medio) y luego querer imponer una semana de siete días. Aquí ha llegado la anarquía de los días, de las horas que se van volando, y nos hemos comido el lunes.
Aunque sólo por esta semana.


Si tienes vistas como estas desde casa normal que no te apetezca salir mucho, también es la excusa perfecta para tener gente en casa y compartir este privilegio.






Y ya que estamos en casa y definitivamente ha llegado el otoño, aprovechamos y ponemos algunos toques cálidos. Sacamos las mantas, las mías ya hace semanas que están en los sofás. Renovamos cojines y les damos un poco de color. Y un poquito de fuego, si no tenemos chimenea, unas buenas velas harán el trabajo.

Feliz Martes, bueno lo que queda
Besos
Yolanda

El resto de la casa aquí .