Una de dos: o tengo demasiados libros ( que no creo sea el caso) o no tengo una biblioteca como se merecen (que sí es el caso).
La historia es que tengo un armario en la entrada de casa que hace las veces de biblioteca y mueble de entrada, pero, definitivamente, se ha quedado pequeño.Y no es que el mueble sea pequeño, tiene más de tres metros de eslora, pero ya acumula tantos libros, en vertical y horizontal, que va necesitando un refuerzo. Me encanta la idea que os muestro hoy, pero para eso tendría que quitar la chimenea del salón, es una pieza de Hanbel y no tengo otro espacio para recolocarla, y ni hablar de deshacernos de ella, ésta se viene conmigo adonde yo vaya.Como el baúl de la piqué,vamos.
Y este es mi dilema del jueves, pues vaya chorrada diréis algunos, pero el caso es que tengo algunos libros encerrados en baúles y va siendo hora de que  les dé el aire. Sigo rumiando a ver qué se me ocurre.